- Estrés
y ansiedad: Si te sientes abrumado o experimentas
altos niveles de ansiedad, para ayudarte a regular estas emociones.
- Situación
traumática: Si has pasado por una situación
traumática, para ayudarte en este proceso.
- Problemas
de relación: Si tienes dificultades en tus relaciones
personales, para mejorar la comunicación y resolver
conflictos.
- Adaptación
a cambios: Si estás pasando por un cambio importante
en tu vida, como un duelo o un cambio de trabajo.
- Salud Mental: Si tienes cambios de humor, sientes que sobre piensas, te sobre exiges y/o no puedes dormir por tus preocupaciones.
- Desarrollo
personal: Si buscas mejorar tu bienestar general,
aprender a manejar mejor tus emociones o desarrollar habilidades
sociales, el Coaching es una valiosa herramienta.